Cuando empezamos a involucrarnos en el mundo del vino es normal que nos nazca una ansiedad por saber más y entender todo sobre la materia. Ante un proceso más bien lento y que requiere de probar y probar vinos, idealmente, las ganas por abarcarlo mucho pueden resultar en frustración. Afortunadamente, existen iniciativas cuyo objetivo es tendernos esa mano y compartir el conocimiento y experiencia para entrar de lleno en los sabores, aromas y texturas que cada vino nos ofrece. Tal es el caso de Wine Time, espacio organizado por Isabel Trigo precisamente para aquellas personas que quieren saberlo todo cuando de vinos se habla.
“Yo he comenzado a involucrarme en el vino porque mi familia tiene una bodega. Quería aprender de procedimientos, historia, a catar vinos y distinguir entre ellos. Y así, en estos últimos años, me he dado cuenta de que los espacios que las mujeres tienen para aprender de vino son más limitados”, señala Isabel, quien junto a su familia trabaja en la bodega Barbacana. En lugar de sentarse a esperar que el conocimiento llueva para todos, Isabel decidió actuar y generar los espacios que, desde su perspectiva, hacían tanta falta.
“Wine Time es un espacio para compartir, aprender y disfrutar… hecho por mujeres, para mujeres.
Isa Trigo
Bautizada como Wine Time, la iniciativa de Isabel consiste en catas y charlas técnicas. “Cerrando la idea, me di cuenta de que en este rubro tan importante para el país somos muchas las mujeres que formamos parte de las bodegas. Sin embargo, no se conocía lo que cada una hace en las bodegas”, apunta. Es así que Wine Time se yergue como una espacio en el que mujeres de diferentes bodegas, sommeliers, enólogas, embajadoras de marca, entre otras, pueden compartir su bagaje y labor. El objetivo es aprender y revalorizar el rol de la mujer en todos los niveles del rubro.
Isabel es una firme creyente de que, para mejorar las ventas y el mercado, un buen primer paso es empezar por educar al consumidor en la materia. Por otro lado, no descuida la convivencia y trato social, pues las ocho ediciones del Wine Time entre Tarija, La Paz, Santa Cruz y Cochabamba le han mostrado el poder del vino para formar lazos: “Entramos como desconocidas y salimos siendo amigas”.