Fotografías: Erich Conzelmann
Una foto que combina el blanco del vestido de novia con el verde de los viñedos se ha vuelto no sólo frecuente, sino añorada cuando de matrimonios se habla. Si se le pregunta a los abuelos, esa postal no era tan común en las ceremonias de antaño, pues ni los viñedos ni las bodegas estaban acostumbrados a abrir sus puertas al público. Hoy, la postal de los novios con las copas de vino en la bodega es esa foto que se presume enmarcada.
Y es que este protocolo de matrimonio ha calado profundo y ha cambiado la idealización de las bodas en Tarija y el resto del país. Ahora se planea la forma más eficaz de trasladar a los invitados a la bodega en cuestión o de llevar la ceremonia religiosa hasta ahí. Se trata de toda una redefinición que demuestra una vez más la importancia e impacto de la industria vitivinícola del país. No hablamos de simples eventos que juntan a amigos, no es la guitarreada del fin de semana; se trata de uno de los momentos más importantes en la vida de los novios. Y para ello eligen un viñedo.
Ante la pregunta de por qué la gente decide casarse en estos espacios, Raquel Cárdenas, wedding planner y cabeza de DE Glamour Eventos no titubea y dice: “Es un destino que atrae por sus paisajes, por su naturaleza y por las distancias cortas. Las personas que nos visitan de otros departamentos pueden encontrar en Tarija la opción de vivir una hermosa experiencia con un buen presupuesto y sin hacer malabares con la logística”. Raquel ha visto a familias de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y el resto del país llegar a Tarija sólo para unir los lazos definitivos en medio de las bodegas.
De hecho, ella misma recuerda la época previa a esta tendencia: “Llegué a Tarija a tocar puertas, a conversar sobre el proyecto de cómo desarrollar a Tarija. Toqué puertas a bodegas, tuve reuniones con muchos prestadores de servicios. Fueron muchas horas de reuniones con posibles clientes contándoles por qué era necesaria mi contratación como wedding planner. En ese entonces, la planeación de bodas era algo más familiar. Hoy, 18 años después, vamos viendo los frutos de este caminar y de la confianza de mis clientes”
Las experiencias al aire libre y en espacios naturales, la gastronomía del alto nivel y los mejores vinos y singanis son aquellos elementos que pesan en la balanza a la hora de elegir el espacio para una boda. Y en un viñedo, estos destacan por sí mismos y más con los novios en frente.
La Historia de DE Glamour Eventos
En 2004, tras una larga estadía en Santa Cruz, donde ganó experiencia y se especializó como organizadora de eventos, bodas y en turismo enológico, Raquel regresó a Tarija con esa imagen de los novios en el viñedo entre ceja y ceja.
La planeación de una boda, ya sea en una casa, en un salón o en una bodega, es algo que requiere la intervención de una profesional. Más de cien parejas y familias han pasado por las manos de Raquel y de su empresa DE Glamour Eventos para hacer realidad esa mágica subida al altar, ese primer gran paso de una nueva vida, de la unión de dos familias, de una nueva historia.
